Esta receta de mejillones en salsa picante es un pincho o tapa de lujo para picar o servir como entrante. Una de la las mejores formas de cocinarlos.
Mejillones en salsa picante
Ingredientes
- 1 Kg de Mexillón de Galicia
- 1 cebolla mediana
- 1 pimiento verde pequeño
- 1 diente de ajo grande
- 150 ml. de tomate frito casero
- 1 guindilla o más
- 1 cucharada (de postre) de Pimentón de la Vera picante o salsa Tabasco
- Vino blanco
- 50 ml de aceite de oliva virgen extra
- 2 hojitas de laurel, un poco de perejil fresco picado y sal (al gusto)
Preparación
Preparación de los Mejillones
- Comenzamos por limpiar los mejillones debajo de agua del grifo, retirándoles las barbillas y cualquier otra impureza o suciedad que traigan consigo.
- Ponemos una olla grande con un buen chorro de vino blanco (ribeiro, godello o albariño) en el fondo, incorporamos los mejillones, un par de hojas de laurel y aplicamos fuego alto durante 3-4 minutos hasta que se hayan abierto en su totalidad.
- Retiramos del fuego y reservamos para que se atemperen y podamos echarles la mano.
- Una vez pasados unos minutos, los vamos quitando de la cazuela, retirándoles una de las conchas.
- Los reservamos en una fuente para el emplatado final. El líquido resultante lo aprovecharemos también para elaborar la salsa.
Preparación de la Salsa Rabiosa
- Picamos con un buen cuchillo en “brunoise” (pequeños daditos) la cebolla y el pimiento verde.
- En una sartén amplia con aceite de oliva virgen extra y los pochamos, junto al ajo bien picadito, a fuego medio.
- Pasados un par de minutos salamos para que sude la cebolla y nos ayude a que se ablanden las verduras.
- Retiramos el rabillo y las pepitas a la guindilla y la echamos entera en la sartén para que vaya soltando su picante al resto de ingredientes.
- Pasados unos 6-7 minutos tendremos las verduras bien pochadas y blanditas.
- Vertemos ahora el tomate frito, preferiblemente casero (ganará mucho la salsa con su sabor intenso) y removemos para que se mezcle bien con el sofrito. Del líquido resultante de los mejillones, colamos la cantidad de medio vaso, la incorporamos a la salsa y mezclamos.
- Con la guindilla tendremos bastante picante pero aún no hemos llegado a la categoría “rabiosa”.
- Añadimos a la salsa una cucharada (de postre) de Pimentón picante o en su defecto un buen chorro de salsa Tabasco al gusto.
- Dejamos que reduzca la salsa otros 5-6 minutos a fuego medio para que se vaya espesando y gane en intensidad de sabor.
- Emplatamos los mejillones en una fuente, los cubrimos con un poco de salsa picante y espolvoreamos por encima perejil bien picadito como acompañamiento y decoración.